La indemnización compensatoria es un término muy utilizado en el mundo jurídico y laboral, que se refiere a una compensación económica que se paga a los trabajadores en casos específicos. Esta compensación está destinada a cubrir los perjuicios económicos que puede sufrir un empleado cuando pierde su trabajo de forma injustificada. En la mayoría de los casos, esta pérdida se produce por motivos ajenos a la voluntad del trabajador y que son responsabilidad del empleador o de la empresa en la que trabaja. En este artículo vamos a explicar qué es exactamente la indemnización compensatoria y cómo funciona este pago para los trabajadores.
Introducción
La indemnización compensatoria es una figura presente en el derecho civil que tiene como finalidad compensar a la parte que se ve en una situación económica desfavorable tras el divorcio o la separación de hecho conyugal. Esta figura está presente en la mayoría de los países de Latinoamérica y Europa.
Se trata de una herramienta que busca resarcir a la parte desfavorecida por la disolución del matrimonio, especialmente en el caso de que durante la vigencia del mismo uno de los cónyuges haya renunciado o reducido su carrera profesional o laboral en pos de los intereses familiares, los cuidados de los hijos, las tareas del hogar, etc.
¿Quién puede solicitar la indemnización compensatoria?
Cualquiera de los cónyuges puede solicitar la indemnización compensatoria en el momento en que se produce el divorcio o la disolución de la unión conyugal. Esta figura es solicitada en casos en los que se produce una gran diferencia económica entre los cónyuges después del divorcio.
Además, la indemnización compensatoria también puede solicitarse en el caso de que la renuncia profesional de uno de los cónyuges haya sido la causa principal de la importante diferencia económica entre los miembros tras el divorcio.
¿En qué consiste la indemnización compensatoria?
La indemnización compensatoria es un derecho legal que obliga al cónyuge de mayor situación económica a hacer una aportación económica, ya sea temporal o permanente, que permita corregir la desigualdad que se ha generado a raíz de la separación y la renuncia profesional del otro cónyuge.
Esta aportación económica puede ser fijada en el momento del divorcio o puede ser acordada posteriormente, dependiendo de las circunstancias del caso. Es importante recalcar que esta indemnización no debe ser considerada como una pensión alimenticia o compensatoria.
¿Cómo se calcula la indemnización compensatoria?
Para calcular la indemnización compensatoria se tendrá en cuenta la duración del matrimonio y la inversión realizada por cada uno de los cónyuges. En este sentido, se tendrá en cuenta la formación, el trabajo desempeñado, los ingresos generados, la edad y la capacidad laboral de cada persona.
Además, se valorará el trabajo desempeñado por el cónyuge que ha renunciado a su carrera profesional para cuidar de los hijos, y en consecuencia, se ha visto en una situación de desigualdad económica tras el divorcio.
En cualquier caso, será necesaria la intervención de un abogado especializado en derecho de familia para la fijación de la indemnización compensatoria.
¿Cómo se abona la indemnización compensatoria?
La indemnización compensatoria puede ser abonada de forma periódica o de forma única según el acuerdo tomado por las partes. En todo caso, se trata de una cantidad económica que se fija mediante una negociación entre los cónyuges o, de forma contraria, mediante el procedimiento judicial de la fijación de la indemnización.
En el caso de que la parte obligada al pago no cumpla con la obligación de abonar la indemnización, el cónyuge afectado tendrá que realizar una acción judicial para solicitar el cumplimiento de la sentencia o del acuerdo de divorcio.
Lo que sí es importante destacar es que esta indemnización se debe recoger en el acuerdo de divorcio o en la sentencia judicial, de lo contrario no será exigible.
Conclusiones
La indemnización compensatoria es una figura esencial en los divorcios y separaciones ya que permite corregir las desigualdades económicas que se puedan generar tras la disolución del matrimonio. Esta herramienta jurídica busca resarcir a aquellas personas que han renunciado a su carrera profesional o a sus ingresos en pos de la unidad familiar.
La intervención de un abogado especializado es recomendada para la fijación de la indemnización compensatoria ya que se tendrá en consideración no solo las circunstancias económicas de los cónyuges, sino también el trabajo desempeñado por cada uno y la inversión realizada por cada miembro de la pareja.