El Convenio Regulador es un documento prioritario que se crea en procesos de separación, divorcio o guarda y custodia de menores. En ocasiones, puede ser necesario modificarlo, bien por petición de una de las partes o bien por cambios en la situación personal y económica de los implicados. La modificación del Convenio Regulador requiere un proceso específico en el que se deben seguir ciertos pasos y cumplir algunos requisitos, por lo que en este artículo se proporcionarán las claves para realizar este trámite de forma eficaz y eficiente.
Introducción
Antes de comenzar a hablar de los pasos a seguir para modificar el Convenio Regulador, es importante explicar en qué consiste este documento. Se trata de un pacto que se firma tras la separación o el divorcio y que regula las medidas que se deberán tomar en lo que respecta a los hijos, la vivienda, las pensiones y otros aspectos de la relación. Este acuerdo deberá ser aprobado por un juez y en él se establecen las pautas que las partes acuerdan para la convivencia de sus hijos y para su economía.
Sin embargo, con el tiempo y conforme cambian las circunstancias, es posible que alguna de las partes decida que hay que hacer algunas modificaciones en el convenio. En este artículo vamos a ver cuáles son los pasos a seguir para ello y cuáles son los requisitos más importantes.
Paso 1: Analizar las causas de la modificación
Antes de comenzar a modificar un Convenio Regulador, es fundamental que las partes analicen con detenimiento los cambios que quieren realizar en el mismo y las causas que los motivan. Por ejemplo, puede ocurrir que uno de los padres se quede en paro o que el progenitor que recibe la pensión de alimentos se vuelva a casar.
Cualquier situación que modifique la anterior deberá ser analizada con detenimiento para concretar qué modificaciones deben ser plasmadas en el Convenio Regulador, bajo qué términos y en qué medida.
Paso 2: Trabajo conjunto entre las partes y el abogado
El segundo paso es buscar el asesoramiento legal y trabajar conjuntamente con el abogado para redactar las modificaciones que se quieren efectuar. Es importante contar con un profesional especializado en este tipo de trámites, que pueda ofrecer una guía legal y consejo sobre cómo modificar el convenio, y que permita a las partes llegar a acuerdos, en caso de ser posible.
Es importante recordar que las partes pueden pedir la modificación del Convenio Regulador de mutuo acuerdo. En este caso, ambas partes tienen que estar de acuerdo en las nuevas condiciones y estas deberán ser presentadas ante el juez que correspondiera para su aprobación y registro.
Paso 3: Presentación de la demanda
Una vez que se han redactado las modificaciones al Convenio Regulador y se han acordado las nuevas condiciones, el siguiente paso es presentar la demanda de la modificación en el lugar que corresponda. Esta demanda puede ser presentada en el mismo Juzgado que aprobó el Convenio Regulador original, aunque esto no es estrictamente necesario. Lo importante es que se presenten documentos que justifiquen las razones de la modificación, las nuevas condiciones que se van a establecer y el acuerdo alcanzado.
Es recomendable que la demanda sea presentada ante el juzgado por un abogado especializado en derecho de familia, ya que este tipo de procedimientos exige mucho rigor y conocimientos especializados.
Paso 4: Audiencia
Una vez presentada la demanda, el juez citará a ambas partes a una audiencia. En este acto, las partes expondrán sus argumentos y el juez tomará en consideración las pruebas y documentos presentados con la demanda.
Es posible que el juez proponga una solución diferente a las modificaciones planteadas si no las considera necesarias o si considera que no se dan las circunstancias exigidas para poder llevarlas a cabo.
Paso 5: Aprobación del nuevo Convenio Regulador
Finalmente, si el juez considera que las modificaciones planteadas cumplen con los requisitos legales, establecerá un nuevo Convenio Regulador. Este nuevo acuerdo deberá ser firmado por las partes y aprobado por el juez para que tenga validez legal.
Es importante que el nuevo Convenio Regulador se registre en el Registro Civil y se inscriba en los libros correspondientes, a fin de que tenga carácter oficial.
Conclusión
Modificar un Convenio Regulador no es un trámite sencillo, pues requiere de conocimientos legales y de un trabajo conjunto entre las partes y los abogados. Es fundamental trabajar con un profesional especializado en derecho de familia para llevar a cabo las modificaciones adecuadas y poder contar con la ayuda necesaria para defender los intereses de cada parte.
En cualquier caso, es importante contar con los documentos y pruebas necesarias para justificar los motivos de la modificación. Es una buena oportunidad para ajustar aspectos del Convenio Regulador que se han quedado obsoletos o que ya no responden a las necesidades de las partes.